La Sinfónica de St Louis fundada en 1880, nos trae un precioso programa con fuerte sabor americano: Adams, norteamericano de nacimiento y uno de los compositores estadounidenses más populares del país; Korngold que, junto a su familia se trasladó a Estados Unidos debido a la presión nazi a la que fue sometido; y la Sinfonía del Nuevo Mundo de Dvořák, obra compuesta por el compositor durante su estancia en el país en 1893 que se estrenó el 15 de diciembre del mismo año en el Carnegie Hall dirigiendo Anton Seidl la Filarmónica de Nueva York.